Considerando la replicabilidad de los resultados de Salamanca, desde la Comisión Europea se valora la capacidad de este proyecto para como referente a otras ciudades monumentales y patrimoniales de Europa
El proyecto LIFE Vía de la Plata del Ayuntamiento de Salamanca, que creará un gran corredor verde en la ciudad, se encuentra en una fase de ejecución muy avanzada y sus acciones ya son visibles en diversos puntos de la ciudad. Desde su inicio, el proyecto incluía un importante plan de transferencia y replicabilidad con el fin de que las acciones llevadas a cabo en la capital charra pudiesen ser compartidas con otras ciudades que puedan presentar una coyuntura similar. De acuerdo con ese objetivo, se han establecido contactos con más de 20 ciudades europeas, integrantes de la red de Ciudades Patrimonio, y también con otras entidades comunitarias para poner a su disposición los conocimientos y resultados de las actuaciones realizadas en Salamanca.
En la toma de contacto con otras ciudades, desde el Ayuntamiento de Salamanca se ha puesto énfasis en cómo el proyecto LIFE Vía de la Plata aborda la construcción de infraestructuras verdes urbanas a través de soluciones basadas en la naturaleza que mejoran los servicios de los ecosistemas en una Ciudad Patrimonio de la Humanidad como Salamanca. Considerando la replicabilidad de los resultados que se van obteniendo, desde la Comisión Europea se valora la capacidad de este proyecto para servir de ejemplo a otras ciudades monumentales y patrimoniales de Europa que quieren adaptarse al cambio climático, mejorando las condiciones de vida de sus habitantes y visitantes.
En la comunicación realizada se destaca también la importancia de la monitorización de resultados, explicando que el proyecto está ejecutando 41 actuaciones de soluciones basadas en la naturaleza en Salamanca y que la efectividad de estas acciones se prueba a través del control y seguimiento de 43 servicios de los ecosistemas, conforme a la clasificación CICES (Common International Classification of Ecosystem Services).
Para ello se monitorean 149 indicadores: 83 de servicios de los ecosistemas, 25 de cambio climático, 10 de salud, 18 socioeconómicos y 13 culturales y patrimoniales. Para algunos de ellos se están instalando 11 estaciones MES (Equipos de Monitorización Inteligente conectados a la nube) con sensores para la monitorización continua de parámetros ambientales que se conectan a la plataforma Big Data del proyecto Smart City. De hecho, es especialmente significativo que ésta es la primera vez que estos servicios de los ecosistemas se miden a nivel urbano y se aplican herramientas de inteligencia artificial en una Ciudad Patrimonio de la Humanidad.
Con estos argumentos, el equipo técnico del proyecto ha invitado a esta red de ciudades a compartir los conocimientos adquiridos en el desarrollo del proyecto y a colaborar en un intercambio de medidas, proyectos y acciones enfocadas a lograr ciudades más sostenibles, saludables y con mayor calidad de vida para sus habitantes, que sean capaces de afrontar los retos del futuro.
Documentación disponible en la web del proyecto
Dentro del mencionado plan de transferencia y replicabilidad del LIFE Vía de la Plata, la web del proyecto dispone también de un apartado enfocado a compartir documentos que explican los pormenores de actuaciones realizadas en Salamanca y que pueden ser de utilidad para su aplicación en otras ciudades.
En www.lifeviadelaplata.com/documentacion/ es posible consultar una sección concreta de ‘Transferencia y replicabilidad’, donde se pueden consultar y descargar documentos como el ‘Manual de recomendaciones para la ejecución de actuaciones’, una ‘Guía para la creación de ISLAS BIODIVERSIDAD para renaturalizar solares y áreas degradadas’ o la ‘Guía para la creación de una Torre de Biodiversidad’.
Junto con esta sección, se incluye otra de ‘Modelos de utilidad o herramientas para la toma de decisiones’, donde, basándose en le experiencia de Salamanca, se proponen una serie de herramientas que sirvan para la planificación urbana con criterios de renaturalización y adaptación al cambio climático.